El estreno de Lichtspiel, Schwarz-Weiss-Grau, tuvo lugar a principios de marzo de 1932: demasiado tarde como para dar un nuevo impulso a la vanguardia, y cuando posturas similares ya formaban parte del lenguaje cinematográfico.
El eje central gira en torno al objeto más famoso de los creados por László Moholy-Nagy, 'el aparato que puede experimentar con la pintura de la luz'; el Utensilio luminoso para escenario eléctrico de 1930, posteriormente también llamado Modulador espacio-luz (Licht Raum Modulator). El Modulador espacio-luz y la película Lichtspiel, Schwarz-Weiss-Grau forman 'una pareja para la que cada uno constituye un elemento fundamental en la contextualización del otro'. La película pretende reproducir 'no sólo el amplio espectro de las múltiples variaciones que pueden crear los efectos de luces y sombras, sino también detalles sobre cómo está construido el aparato'. Pero la estructura sólo puede reconocerse si uno ya conoce el aparato. Al menos en las copias conservadas de la película, no existe ningún plano en el que el modulador se vea al completo. No obstante, se realizaron reconstrucciones con fragmentos de tomas diferentes, y la revista vanguardista Close up publicó en 1932 una fotografía del modulador, y posteriormente, en 1936, lo hizo Telehor, aunque ambas reproducciones muestran una sombra negra del aparato marcada en la pared. Desde este punto de vista, la película adquiere un carácter probatorio aún más marcado; como muestra el posterior plan de estudios de la School of Design: «El siguiente paso es crear y fotografiar un modulador de luz. Un modulador de luz es un artefacto simple; su función es capturar y reflejar, modular la luz».
László Moholy-Nagy es una de las grandes figuras de la modernidad. Su concepción de las artes como un todo y su deseo de suprimir la separación y jerarquización entre ellas; su confianza en las posibilidades de una nueva cultura industrial en la que las distinciones entre arte y no arte, entre artesanía y producción mecanizada dejaran de ser pertinentes; su pasión por la pedagogía como medio para llegar al ideal del «hombre nuevo y total» y la necesidad del arte para lograrlo; su anhelo de acabar con la noción arcaizante de la figura del artista como genio, su aspiración al ideal de artista total... hacen de él una figura imprescindible y fundamental de la primera mitad del siglo XX. [Fragmento de László Moholy-Nagy. El Arte de la Luz, de Oliva María Rubio]
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| Composition A XI. 1923 |
Pintor, fotógrafo, tipógrafo, pedagogo y director de cine, László Moholy-Nagy nunca diseño nada que se llegara a producir en serie, pero a través de sus libros y sus clases se convirtió en una importante influencia en el mundo del diseño. Nacido en Bácsborsód, Hungría, estudio derecho en Budapest. Empezó a diseñar tras ser herido en la Primera Guerra Mundial, mientras cumplía el servicio militar. Después de la guerra fundó un grupo y una revista vanguardistas con el nombre de Ma (Mañana). Moholy-Nagy era un artista ambicioso: en 1920 se traslada a Berlin y en 1922 se incorpora a la plantilla de la Bauhaus, donde dirigía un taller de metalistería con alumnos como Wilhelm Wagenfeld o Marianne Brandt. También en Berlin, dirigió películas abstractas y semi abstractas y edito los Bauhausbücher, una colección de libros sobre las teorías del arte y del diseño, teorías que habían surgido en Weimar y Dessau. Gropius, Klandinski, o Malevich destacan como algunos de los autores incluidos en esta colección. Moholy-Nagy será uno de los primeros artistas en centrar su atención en la belleza implícita de las maquinas. Su Buch neuer Kunstler (1919) incluía fotografías de aviones como adelanto de su nueva estética. Su creencia principal era que las artes visuales debían referirse a la 'higiene de lo optico', una de sus típicas expresiones.
Pionero de los nuevos medios, sus 'Telephone Paintings', cuadros que encargó por teléfono a una fabrica de esmaltes leyendo las coordenadas de un papel milimetrado, son de alguna manera los primeros productos artísticos de 'confección'. Vivió cautivado por las maquinas: 'Todos somos iguales ante la maquina (...) en tecnología no hay tradición ni conciencia de clases'. El artefacto más memorable que salio del taller de metales de Moholy en la Bauhaus fue una lampara de mesa diseñada por su alumno más aventajado, Wilhelm Wagenfeld. Diseñada entre 1923-24, producida desde 1927, era 'decisiva, sencilla y bella' en palabras de Ilse Gropius, aunque un fraude si se tiene en cuenta su elevado coste de producción y el hecho de que estaba hecha a mano...
Moholy-Nagy se traslada a Londres tras el cierre de la Bauhaus donde diseñará exposiciones para los Grandes Almacenes Simpson's mientras ilustra libros para Betjeman o se encarga de la dirección artistica de la revista Architectural Review. En Chicago, a donde llega para dirigir la New Bauhaus (más tarde el Institute of Design de Chicago), invitado por Walter Paecke, Moholy-Nagy intenta unificar sus ideas sobre arte y tecnología en un ambicioso programa pedagógico. The New Vision y Vision in Motion siguen siendo libros muy importantes en educación artistica hoy en día.
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